Apoyo mutuo contra la austeridad

En tiempos de crisis recibimos un mensaje de miedo por parte de las personas que controlan el poder —que nos tenemos que “apretar el cinturón”, que tenemos que aprender a vivir con menos…— y entonces, desde una perspectiva libertaria, en vez de tomárnoslo como algo negativo, debemos tomárnoslo como un contexto idóneo para extender nuestras prácticas y para tejer lazos entre todos para autoabastecernos e intentar cubrir todas las necesidades de nuestras vidas.

En casi todos los ámbitos de nuestras vidas las alternativas a esta crisis pasan por una transición que nos permita resolver cada vez más nuestras necesidades materiales e inmateriales basada, en primer lugar, en el descenso de nuestros requerimientos de consumo material y, en segundo lugar, en el aprovechamiento responsable de los bienes naturales y sociales disponibles en nuestro entorno relativamente cercano.

Para los poderes neoliberales las épocas de austeridad pasan por una propuesta de reajuste económica, con todo lo que implica a nivel social y ecológico. Es aquí donde nosotros vemos el contexto idóneo para desarrollar nuestras prácticas autogestionarias como herramienta de transformación social, satisfaciendo las necesidades que el sistema deja descubiertas y trazando redes productivas de apoyo y solidaridad para generar y compartir bienes y recursos.

Por eso creemos necesario un debate de cómo conseguir llevar a cabo la idea del apoyo mutuo real y palpable en nuestra vida diaria.

Ideas para el debate

Definición de austeridad
Normalmente usamos la palabra austeridad con dos connotaciones diferentes. Una de ellas es negativa y es la que se usa desde la política neoliberal: ajustes estructurales como el desmantelamiento de los servicios públicos, privatizaciones, despidos de trabajadores, recortes sociales, retraso de la edad de jubilación, supresión de libertades…
La otra es positiva y se refiere a un estilo de vida en el que no consumimos compulsivamente, no derrochamos. La austeridad como valor para superar una sociedad consumista y fagocitadora de recursos.
En el debate nos referiremos a la primera, la austeridad impuesta como medida para salir de la crisis.
La austeridad o crisis es una oportunidad de crear redes de apoyo mutuo entre las personas ya que son circunstancias en las que muchas veces las necesidades básicas no están cubiertas porque los recursos son más escasos o más caros. Esto hace que crear estas redes sea una necesidad por lo que tendrán un carácter mucho más de raíz, más básico.
Limitaciones
Desde la especialización obrera y la masificación de la vida en las ciudades hemos perdido muchas habilidades productivas, artesanales, etc. No tenemos desarrollada la capacidad de producir nuestros propios recursos, alimentos, etc. Además, tenemos dificultades para crear lazos organizativos que sean prácticos de verdad.
Individualmente no podemos abarcar todos los saberes y habilidades intrínsecas en nuestras vidas. Con la autogestión cooperativa podemos abarcar muchas más necesidades que desde una práctica individual a la vez que generamos sociabilización y practicidad en la repartición del trabajo.

Perdurabilidad
¿Cómo hacer que estos lazos de apoyo mutuo perduren en el tiempo cuando pase la época de “crisis” cuando las necesidades básicas dejen de estar en peligro y se puedan obtener por medio del mercado capitalista?
¿Cómo conseguir que esta red no caiga en el asistencialismo y sirva como herramienta de transformación?

Ejemplos
Colectivizaciones en Huesca y otros ejemplos durante la Guerra Civil del 36, cooperativas de trabajo, Kurdistan actual…